Cada vez somos más las personas que comemos en el trabajo durante la semana y las comidas de tupper se han convertido en una tendencia al alza para evitar gastar dinero en restaurantes o en comida rápida para llevar. Es cómodo, económico y, además, también puede ser una forma de comer más saludable ya que, fuera de casa, no siempre encontramos las mejores opciones.
El único problema de las comidas de tupper es que muchas veces no sabemos qué preparar. Nos faltan ideas y, a menudo, nos falta saber como variar para no llevar siempre lo mismo.
Pues bien, hoy os traemos consejos e ideas para que preparar fiambreras saludables deje de ser un dolor de cabeza.
5 consejos prácticos:
- Planificar bien la semana. Podéis preparar un menú semanal, anotar qué vais a llevar cada día y, importante, pegarlo en la nevera. De este modo podréis verlo de forma rápida y tenerlo bien presente. Además, si tenéis que ir a comprar, os servirá para saber que necesitáis para toda la semana.
- Cuando preparéis la cena, aprovechar y cocinar el tupper del día siguiente. De este modo, si por la mañana os despertáis con el tiempo justo ya no tendréis que pensar en la comida.
- Cuando os pongáis a cocinar durante el fin de semana, o en otro momento que tengáis tiempo, aprovechar para preparar algunas raciones de más. Así lo podéis congelar e ir usando a lo largo de la semana.
- Tener siempre algún “comodín” en la nevera y en la despensa. Estos podrían ser: huevos duros, arroz integral u otro cereal cocido, legumbres cocidas, pescado en conserva, hortalizas (tomates cherry, zanahorias o bolsas de brotes verdes para ensalada)… En caso de tener poco tiempo ¡os salvarán el día!
- Pensar en platos combinados a menudo es más fácil que un primero y un segundo. Además, combinarlo todo en una fiambrera te resultará mucho más fácil para transportarlo.
Trucos para hacer tuppers más saludables
Para que nuestras comidas sean sanas y equilibradas es importante tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Incluir siempre verduras y hortalizas, ya sea en forma de ensalada, crema, salteadas, al vapor, al horno… como más os gusten, pero que no falten.
- Combinar las verduras con una fuente de proteína de calidad: carne, pescado (variar entre el blanco y el azul), huevos ecológicos o legumbres.
- También podéis añadir cereales integrales (arroz, quinoa, mijo, trigo sarraceno, cuscús, cebada…) o tubérculos como la patata, el boniato, la chirivía o la yuca.
- Aliñar con aceite de oliva virgen extra.
- Podéis complementar las preparaciones con algunos frutos secos, semillas o aguacate.
- De postre, optar por fruta fresca de temporada o, de vez en cuando, yogur o kéfir natural (mejor si son de cabra). Las infusiones también son una buena opción para terminar las comidas.
Si estáis cansados de las recetas de siempre y buscáis innovar, en el apartado “comidas en el trabajo” del libro Mis recetas más saludables de Gordon Ramsay encontraréis muchas ideas fáciles para el día a día.